YA NI NADA

Suficiente.
Llena todo con su presencia.
Sin estar, está con ojos lejanos
Y tristes
Mira sin saber qué.
Contempla.
La realidad profunda,
Tremenda y furiosa que vive.
Hoy y casi siempre y ve solo
Sentimientos encontrados,
O en contra dos amores,
Por ganar su corazón`,
Por poseer su cuerpo,
Por gozar de sus blancas sabanas.

Y grita en silencio
Con sus ojos color del tiempo
Oscuros como la noche que
Pasa tu alma.

Y escucha...
Te necesito.....
Ya ni nada pasa por mi cabeza
Te necesito....

Y el miedo
Que lo cubre todo con la incertidumbre,
Sin atender el principio
Que todo lo puede y cambiar.