oh¡¡ fuente
que gritaste y gritado
con silencios eternos
surges en la plenitud de los tiempos
surgente que fluyes
en eternidad, te haces vida
cristalina pura.
Que oido
Dejo de ser
Insurgente,
Y me vuelvo esclavo
Que abreva en ti,
Y me haces libre.
Y libre me haces volar
Como el águila,
Con plumaje renovado
En la oquedad de la roca.
Y libre me haces cantar
Como las aves canoras.
Y libre me haces hablar
Como las palomas
Que gorjean en
Suaves arrullos
Y llegan a picos
Elevados de amor
Sublime.
Oh¡¡ fuente de
Aguas brillantes como
El aguamarina
Y llenas el hueco de la
Vasija que sabe
Contener y guardar.
YA MI NADA
Ya mi nada
Anda como Adán,
Contigo, anda
Despacio y garboso,
Al contemplarte,
Mi ser nada
Es algo, se hace eterno
En aquel que inspiro
Tu belleza, y espiro tu vida.
Frágil y etérea
Como pompa de jabón
Tornasolada a la luz del mediodía.
Y otra vez nada
Si todo se vuelve etéreo,
Inefable.
Ya mi nada, escondida
En tu presencia, poderosa
La hace fecunda, vital
Rica y preciosa.
Ya mi ojos no ven
Contemplan.
Ya mis labios no hablan
Gorjean.
Ya mi corazón no palpita
Vive.
Y como un espejo mi vida
Refleja y comunica
Lo que tu presencia frágil y tierna
Es capaz de mover.
Ya mi nada se ahonda
En tu misterio de mujer.
Sueños lejanos y cercanos
Van y vienen como olas
En la escollera.
Tratando de romper
Las rocas del tedio
Por el paso del tiempo que pesa,
Cabeza blanca como las espumas.
Yo mar, tu cielo.
Me abarcas todo.
Yo selva frondosa y verde.
Tu nubes blancas y cielo azul.
Ya mi nada
Absorto en la quietud de la tarde porteña
Recorre las palabras de
Los poemas de amor
Mas bellos del mundo.
Entonces, para que
Seguir escribiendo?
Parece estar todo dicho
Por Neruda, Benedetti,
Cardenal, Alfonsina, Whitman, Camoens......
Ya mi nada recuerda las palabras
De Himmet,
Y lo mejor de todo aquello que tengo
Para decirte todavía
No le he dicho.